Corriendo a las 14:00

Cumplí el objetivo y fue enteramente satisfactorio. Correr antes de comer no es tan malo como parece.

A las 14:30, nos dirigimos Ilde y yo a los vestuarios de la empresa para cambiarnos y salir a correr. Él está acostumbrado a hacerlo a esa hora, yo era la segunda vez que lo hacía.

En primer lugar nos sorprendió el día tan bochornoso que hacía, no había sol pero sí mucho calor.

Fuimos desde el Alcampo por la Avenida de la Paz, Felipe II hasta el Parque de Maria Luisa. Un par de vueltas por el mismo y vuelta para el Alcampo.

Total 7,30 km en 40:36. A un ritmo de 5:33 min/km. Yo creo que habría corrido más rápido si hubiese puesto el ritmo, pero me vino bien rodar tranquilo porque me noto las piernas bastante cargadas después de tanto entreno (Guillenazo por medio).

Me gustaría salir el próximo día a correr unos 12 km, para ver como me voy sintiendo con esa distancia y el ritmo que puedo marcar casi dos semanas antes de la Nocturna.

Y repetiremos lo de correr antes de comer. Después incluso se trabaja mejor porque estás 100% despejado.