Sin motivación

Resulta difícil entrenar cuando no tienes un objetivo claro, concreto y próximo. La no participación este pasado fin de semana en la carrera biciclista de Paterna supuso un revés bastante duro a nivel anímico. Ahora estoy en proceso de volver a recuperar las ganas de luchar.

Esta semana he salido sólo un día a correr. Ilde tiró de mi el martes y salimos a la hora de comer a correr por el parque Amate. Fueron unos 45 minutos en los que dimos dos vueltas a un solitario parque y después seguimos hasta el Alcampo. Completamos un poco más de 8km a un ritmo de 5:29.

El entrenamiento en sí fue bastante bien. Al principio me costo coger el ritmo pero cuando empezó a responder el cuerpo me encontré bastante a gusto. Es la vez que más rápido he corrido de entre todas las que lo he hecho con Ilde. Salimos bastante lento (me tengo que reprimir para no tirar más fuerte) pero a la larga creo que luego tengo más fuerzas y, por lo general, acabo mejor.

Aprovechando que el finde me he venido a los caños (desde donde escribo) voy a intentar salir un día a correr por el monte. Me apetece bastante hacer un entrenamiento por camino y campo a través y olvidarme del asfalto y los tubos de escape.

Manteniendo el tipo. 12km

Esto es lo que voy a hacer respecto al atletismo durante estas dos semanas que faltan para Paterna. Mantener el tipo.

La verdad es que mi prioridad sería intentar salir con la bici por lo menos un par de veces o tres de aquí al Sábado 18. Si no, creo que lo voy a pasar bastante mal por tierras onubenses. De todas formas este Sábado pasado que tuvimos la toma de contacto con la sierra las sensaciones fueron buenas.

A lo que iba, ayer volví a salir a correr, llevaba muchos días parado desde la nocturna. Me lo plantee como una salida de kilómetros pero a un ritmo tranquilo. Finalmente salieron 12km a ritmo de 5:33 min/km, lo cual es un ritmo más bajo que en la nocturna pero es la misma distancia. Solo puedo decir que estoy bastante contento con respecto a este entrenamiento.

Me siento muy cómodo con esas distancias. Creo que no voy a aumentar hasta que lleguen mediados de Noviembre. Allí mediré mis opciones reales en la media de Los Palacios.

Mientras tanto, cuando no pueda salir en bici, sumaré kilómetros a las piernas. Eso sí, la bici es ahora lo primero cuando hablamos de deporte.

Sensaciones de la nocturna

Pues ya pasó el primero de los retos que teníamos pendientes: La carrera nocturna del Guadalquivir.

Puedo decir que estoy contento, relativamente contento.

La carrera fue muy divertida. Salimos juntos Ilde, Jorge, David, Colom y yo, acabé en 1:04:51, unos segundos por detrás de Jorge con el que fui toda la carrera hasta entrar en el estadio. Ilde también acabó bastante bien, unos 3 minutos por detrás de nosotros. Si tenemos en cuenta la paliza que se ha dado este mes para llegar en forma puede estar satisfecho.

La carrera me dejó un sabor un poco agridulce, pensé que podía terminar unos dos o tres minutos por debajo de ese tiempo, aunque mi objetivo fundamental, que era el de correr por debajo de 5:30, está cumplido.

El ritmo que me marcó el motivador fue de 5:21 en los 12.12km que marcó de carrera. Bastante ajustado por otra parte.

Lo que más me gustó de todo es que acabé con bastante fuerza, aunque ya notaba cargada las piernas y que iba a tope, no me derrumbé en ningún momento, a diferencia de lo que me pasó la otra vez que corrí (en el 2006).

Por otra parte, tengo ganas de correr otras carreras menos multitudinarias. Aunque el ambiente es genial y ver a tanta gente practicando deporte es, cuanto menos, emocionante, sí que es cierto que en algunos momentos es bastante incómodo, no puedes correr bien, vas esquivando compañeros y al final el ritmo te lo marca la carrera en vez de al revés.

Nunca he corrido otra carrera que no sea esta, al final solo tengo el bagaje de mis entrenamientos en solitario pero ahora se que esto solo está siendo el principio. Quiero correr más carreras... (21 de Diciembre: media de los Palacios...mmm...).

Por cierto, se me olvidaba comentarlo: Se agradece mucho que, entre toda la gente que te anima durante el recorrido, veas caras de tu gente. Mil gracias a los integrantes del Pepineitor Cuberos y Leni (esta chavala tiene el orgullo puma más desarrollado que nadie) y, por supuesto, a mi media naranja que aguantó con frío y dolor de espalda toda la carrera. ¡¡Miles de gracias!!